Este post va dedicado a los amantes del marisco. Para todos aquellos que disfruten de lo lindo con unos buenos langostinos, gambas o gambones, pero que soportan vagamente el mal olor que provoca su elaboración a la plancha, he aquí la solución y nuestro truquito de la semana.
En lugar de dorar este tipo de marisco en la plancha, siguiendo el método tradicional, poned la cantidad deseada sobre una rejilla, regándolos gustosamente con un buen chorrito de aceite de oliva y con bastante sal gorda, e introducid la rejilla en el horno, previamente calentado a máxima potencia.
De esta manera, conseguiréis prácticamente el mismo resultado en vuestro marisco, dorado y sabroso, en tan solo unos minutos (de 5 a 10 como máximo), evitando el desagradable humo y malos olores en vuestras cocinas.
Nosotros ya lo hemos probado y nos hemos chupado los dedos con el resultado. :-)
Publicado por @schinarro para DirectodelOlivar el 10 de octubre de 2011
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